Bolsonaro candidato en 2026 pese a juicio por supuesto golpe: «Todavía no estoy muerto»
El exmandatario brasileño atribuye el juicio a un intento por bloquear su candidatura a la presidencia. El juicio no tiene fecha, pero sería este año y Bolsonaro lo esperará en libertad.

03/27/2025. Muy graves e infundadas”; “todavía no estoy muerto”. Así reaccionó el expresidente Jair Bolsonaro a la decisión de ayer miércoles del Supremo Tribunal de Justicia (STJ) de llevarlo a juicio por supuestamente liderar un golpe de Estado contra el presidente Luiz Inácio Lula da Silva. Bolsonaro asegura que el juicio busca bloquear su postulación para las elecciones de 2026, lo que hace que Brasil esté por entrar en una situación parecida a la del juicio a Lula que le impidió ser candidato en 2018, las elecciones ganadas por Bolsonaro.
Cinco magistrados del STJ aceptaron por unanimidad el pedido de la fiscalía, que imputó a Bolsonaro, de 70 años, por supuestamente liderar una organización criminal que buscó impedir la investidura de Lula tras las elecciones de 2022.
Bolsonaro, que se expone a una pena de prisión de hasta unos 40 años, tachó las acusaciones de “muy graves e infundadas” y rechazó darse por vencido.
“Todavía no estoy muerto. Voy a volver a recorrer Brasil” para reunir a sus votantes, prometió.
Bolsonaro, que ya está inhabilitado políticamente hasta 2030, mantiene su voluntad de aspirar de nuevo a la presidencia en las elecciones de 2026.
Aunque no hay ningún plazo legal, “hay expectativa de que el caso sea juzgado este año” para no interferir en los comicios, dijo a la AFP el abogado penalista Enzo Fachini.
El supuesto plan golpista contemplaba medidas como la elaboración de un decreto para justificar un “estado de defensa” e incluso el asesinato de Lula y del juez Alexandre de Moraes, según la fiscalía. El complot no se habría consumado por falta de apoyo de los altos mandos del Ejército.
La investigación vincula también directamente a Bolsonaro con los disturbios del 8 de enero de 2023, cuando cientos de personas asaltaron las sedes de los tres poderes en Brasilia mientras pedían una intervención militar.
Hasta ahora, 497 personas han sido condenadas por su implicación en los disturbios y otras 532, acusadas de delitos menos graves, han firmado acuerdos con la justicia.
“La dictadura vive de la muerte, no solo de la sociedad, no solo de la democracia, sino de seres humanos de carne y hueso que son torturados, mutilados y asesinados cuando contrarían los intereses de aquellos que tienen el poder”, declaró la jueza Carmen Lúcia Antunes al emitir su voto.
Es una decisión “histórica porque por primera vez bajo un régimen democrático, Brasil juzgará una tentativa de golpe”, dijo a la AFP Marcio Coimbra, director del think tank Casa Política.
“La historia de Brasil está marcada por golpes de Estado, ya tuvimos siete golpes militares” y los brasileños “percibieron que aunque no tuvieran éxito no eran juzgados”. “Eso es una evolución de la democracia”, agregó el analista.
Junto a Bolsonaro, serán juzgados siete colaboradores, incluidos exministros como Walter Braga Netto (Defensa) y Anderson Torres (Justicia), y un excomandante de la Marina, según decidió la corte.
Bolsonaro compareció inesperadamente en el tribunal el martes, primer día de deliberaciones, y mantuvo un semblante serio, sentado en primera fila. Ayer miércoles no se presentó en la audiencia.
El expresidente siguió el segundo día de la audiencia en el despacho de su hijo, el senador Flávio Bolsonaro
“Hay indicios razonables de la fiscalía que apuntan a Bolsonaro como líder de la organización criminal”, dijo el juez Moraes antes de emitir su voto.
Información de elpais.com.uy