La tensión volvió a estallar en el Catatumbo. Más de 300 familias campesinas emprendieron una huida desesperada luego de que nuevos enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las FARC desataran una ola de violencia que paralizó a la región.
12/26/2025. Este viernes, a las 7:00 a. m., las autoridades locales se reunirán en Tibú, Norte de Santander, en un Consejo de Seguridad urgente para evaluar la magnitud de la crisis y definir acciones inmediatas frente al creciente desorden público que golpea a esta zona fronteriza.
Fuentes militares confirmaron que tropas del Ejército Nacional ingresaron al área desde la tarde del 25 de diciembre para intentar contener los choques armados y recuperar el control territorial. Sin embargo, la situación sigue siendo crítica.
La vicepresidenta Francia Márquez se pronunció a través de su cuenta en X, exigiendo el cese de la violencia y la protección de las comunidades que hoy viven bajo fuego cruzado. “Mi clamor es por el respeto a la vida, el territorio y la dignidad de las comunidades del Catatumbo”, expresó, al tiempo que pidió apoyo humanitario inmediato para las familias desplazadas.
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La Defensoría del Pueblo, en cabeza de Iris Marín, también lanzó un llamado urgente a los grupos armados para permitir el ingreso de personal médico y la evacuación de heridos en la zona de La Gabarra–Tibú, donde los combates se intensifican.
Mientras tanto, el Catatumbo vuelve a convertirse en el escenario de una disputa que no da tregua y que mantiene a miles de habitantes en permanente vulnerabilidad.
Redacción Tony Romero para DHH sobre lectura de agencias
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