El escenario político en América Latina está experimentando una transformación profunda que apunta hacia una consolidación de las fuerzas de derecha en la región, según el análisis de Jorge Sanz, analista internacional y académico de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo (UD) de Chile.

12/28/2025. Este fenómeno no es una coincidencia aislada, sino un movimiento coordinado y potenciado por la influencia directa e indirecta del presidente estadounidense Donald Trump,.
La «mano de Trump» en el péndulo Regional
Sanz sostiene que el giro a la derecha ha tenido hitos claros, comenzando por la victoria de Javier Milei en Argentina, a quien Trump aseguró recursos importantes tras su elección, y continuando con el reciente triunfo de «Papi a la Orden» Asfura en Honduras,. Para el analista, la injerencia de Trump es palpable; el mandatario estadounidense utiliza su «peso específico» y herramientas como la amenaza de aranceles para movilizar el péndulo político hacia su favor.
Esta estrategia responde a la nueva Estrategia de Seguridad y Defensa de los Estados Unidos, que define a toda América como su zona de interés exclusiva. El objetivo central de Trump es nítido: lograr la salida de Rusia, China e Irán de la región. Para ello, requiere presidentes alineados que apoyen su proyecto en el marco de su conflicto global superior con China.
Brasil y la resistencia del BRICS
Uno de los puntos críticos en este mapa es Brasil, que actualmente representa la mayor resistencia a la posición de Trump debido a su rol como vocero de los BRICS y su asociación con China y Rusia,.
A pesar de que el actual gobierno brasileño es de izquierda, la sombra de Jair Bolsonaro persiste. Según Sanz, el nombramiento de su hijo, Flavio Bolsonaro, como candidato busca mantener vivo el proyecto de «conservadurismo moral» y el sentimiento «antipetista» frente a Lula da Silva. Se anticipa que Flavio recibirá un fuerte respaldo de Trump para intentar recuperar el Palacio del Planalto en las próximas elecciones.
Chile bajo la administración Kast: entre la simpatía y el «castigo» estratégico
Respecto a Chile, el análisis de Sanz se centra en la próxima asunción de José Antonio Kast el 11 de marzo. Si bien el analista descarta una intervención directa de Washington en el proceso electoral chileno, destaca que ya existe una «simpatía» evidente desde el entorno de Trump.
Sin embargo, Sanz advierte sobre las señales de «ayuda y sanción» que Trump utiliza para modelar la región. Un ejemplo claro es la autorización de venta de aviones F-16 a Argentina y Perú, mientras que Chile ha quedado excluido de estos beneficios estratégicos. Para el experto, esto es interpretado por la diplomacia militar como un castigo o una forma de marcar una voluntad política frente a las posturas previas del estado chileno.
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La encrucijada final: ¿Washington o Pekín?
El análisis concluye con una advertencia sobre el futuro de las relaciones exteriores en el subcontinente. Chile y sus vecinos han intentado mantener relaciones cordiales con todas las potencias (EE.UU., China y Europa) debido a su dependencia del comercio internacional,. No obstante, Sanz asegura que la tensión mundial obligará a los líderes latinoamericanos a tomar una posición definitiva.
«En algún instante, más temprano que tarde, va a haber que tomar una posición en América Latina y vamos a estar con Estados Unidos o vamos a estar con China«, sentencia el académico, señalando que el mundo se encamina hacia un «proceso mayor» donde la neutralidad ya no será una opción viable.
Redacción Elena Calzadilla para DHH sobre análisis en YouTube de Jorge Sanz.
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