La violencia armada en México ha alcanzado niveles preocupantes, que la sitúan en una situación de «conflicto armado», según señaló el jefe de operaciones de la Cruz Roja Internacional (CICR) en México, Miguel Ramírez González, durante la presentación del balance humanitario 2022-2023 de la organización.

El Comité Internacional de la Cruz Roja expresó su preocupación por la escalada de la violencia armada que ha ocasionado más de 30.000 asesinatos en 2022 y ha generado consecuencias humanitarias en diversas partes del país que se asemejan a las que se padecen en «zonas de conflicto armado».

Ramírez González destacó que la violencia armada ha desencadenado consecuencias no visibles, como dolencias psicológicas, limitaciones para acceder a servicios de salud y educación, restricciones de movilidad y ha hipotecado la vida de miles de mexicanos a través de las desapariciones, que ya superan las 112.000 personas.

El jefe de operaciones de la CICR en México señaló que los mexicanos llevan décadas padeciendo los efectos de la violencia, pero ahora se ha agravado. En 2021 se registraron 35. 625 asesinatos, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

Asimismo, el Comité Internacional de la Cruz Roja hizo hincapié en los desplazamientos internos que generó la violencia, que alcanzaron los 379.000 en 2021, superando ampliamente los 262.411 reportados en el 2020 por el mismo instituto de estadística. Ante la compleja situación, Ramírez González planteó que se deben redoblar esfuerzos en la toma de decisiones para atacar las causas estructurales de la violencia en México.

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Es necesario que se tomen medidas efectivas y concretas para acabar con la violencia en el país latinoamericano. La CICR hizo un llamado a las autoridades mexicanas y a la sociedad en general a tomar en serio este problema y a trabajar en conjunto para encontrar soluciones efectivas que permitan mejorar la situación de los mexicanos.

Es fundamental que se proteja a la población y se garanticen sus derechos humanos en todo momento. En definitiva, la violencia armada en México se ha convertido en un problema complejo que requiere de la atención y el compromiso de todos los actores involucrados para poder abordarlo de manera eficaz y poner fin a la situación de conflicto armado que se vive en el país.

Redacción DHH sobre información de latimes.com

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