La economía de Chile arranca 2023, como todos los años por estas fechas la mayor parte de países, tanto autoridades políticas como del sector económico, entregan sus proyecciones para el nuevo ciclo que comienza. Así, Chile habría crecido entre un 2% y 2,5% el pasado 2022, aunque para este ejercicio las predicciones apuntan a que el país deberá enfrentar caídas en su Producto Interno Bruto (PIB) en más de un trimestre.

Desde el Banco Central de Chile (BC), entidad muy reconocida y prestigiada, su Presidente Rosana Costa, hacía ver que la contracción prevista para este nuevo año será debida a un descenso en la demanda, lo considera algo «inevitable» y obligado pasar para reconducir la inflación a la meta del 3% anual y a la vez corregir el desajuste existente entre capacidad de producción y demanda.

Anticipa Costa, que habrá una reducción en la inversión y el consumo nacional lo cual unido al menoscabo de la economía global, traerá a Chile un guarismo negativo al concluir el período de doce meses estimado entre un -0,75% y -1,75%. Para Chile la situación internacional sería la «principal fuente de riesgos» muy por sobre el acontecer de la actividad local.

La presidente del BC, pondera que «el mundo no será una ayuda relevante para el despegue de la economía chilena. Cuál será el impacto económico de la guerra de Ucrania o la evolución de los precios de los alimentos y la energía son preguntas de difícil respuesta» dijo.

Como problemas importantes a encarar la autoridad del BC menciona: los reducidos o nulos crecimientos que pueden darse entre los socios comerciales de Chile, y/o los altos tipos de interés presentes en las naciones de Latinoamérica. Desde los distintos frentes público-privado existe un compromiso de encontrar fórmulas que permitan dar con soluciones para enfrentar los desafíos y aminorar riesgos.

Asimismo, contemplamos importante la visión venida de los empresarios chilenos. El presidente de SOFOFA la rama más antigua de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC) Richard von Appen, dice «creo que este año (2022) ha ido de menos a más. Veo que lentamente se está en una etapa de mayores consensos. Y la verdad que no dejo de tener esperanza en el 2023, a pesar de todas las dificultades que vamos a enfrentar, lo número uno, es que volvamos a tener la amistad cívica que tanto necesita la economía de Chile para volver a conversar y confiar. Y enfrentar las urgencias que tiene hoy día la ciudadanía, como la delincuencia. Lo he dicho varias veces, sin un apoyo ciudadano masivo a la institucionalidad y al rol que cumplen nuestras policías y también nuestra justicia, no lo vamos a resolver» afirmó.

Igualmente, hace pocos días, la ministra de Interior Carolina Tohá dio o conocer las medidas que el gobierno ha impulsado hasta ahora para hacer frente al llamado crimen organizado.

«El Estado tiene que funcionar mucho más articulado», subrayó y puntualizó que «debe tener» mucha mayor organización de la que requiere el crimen común», dijo Tohá. Además, añadió «no todo el crimen que hay en Chile es crimen organizado, no toda persona que asalte es crimen organizado» matizó.

Frente a eso, la jefa de gabinete fue consultada por la percepción de impunidad que mantiene la ciudadanía frente a la realización de delitos violentos. Al respecto, Tohá advirtió que uno de los factores que inciden en eso es la forma en cómo se ha llevado a cabo en el mundo político el debate por la seguridad.

«Por mucho rato lo que la gente ha visto es un gran ruido en la discusión de seguridad, con bajísimo impacto en cambiar la situación», aseguró.

«El debate de política pública y el debate político de la seguridad ha sido muy inconducente. Ha servido para la guerrilla política, para sacarse cuentas unos con otros, pero ha servido poco para enfrentar los problemas que tenemos, y eso es algo que tenemos que cambiar urgentemente«, sentenció la jefa de gabinete. El principal objetivo en la economía de Chile es buscar acuerdos para impulsar proyectos de ley que faciliten la labor de control de los desórdenes, esto está teniendo lugar en medio de una crisis de seguridad que se está dando en el país.

Pocas horas más tarde de emitida estas consideraciones por la ministra de Interior, el Presidente Gabriel Boric indultó a doce personas condenadas en el marco del estallido social del 18 de octubre de 2019 y a un exmiembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), condenado a 16 años de prisión por participar en el asalto a una sucursal del Banco Santander.

Tras este anuncio presidencial los partidos de oposición UDI, RN, Evópoli y Republicanos procedían a comunicar que se restarán de la instancia nacida el 21 de noviembre pasado en la que participan parlamentarios de todos los partidos políticos, bajo la conducción de la ministra Tohá, con vistas a mitigar la incertidumbre política y de seguridad que está viviendo Chile. Queda la impresión que con la decisión tomada por el presidente Boric, su ministro de Interior pareciera perder autoridad.