Previo a que comiencen las votaciones en las cuatro comisiones del Consejo Constitucional, los expresidentes de Chile entregaron sus apreciaciones sobre el proceso constituyente y el texto redactado por la Comisión Experta ante consejeros y comisionados.

08/21/2023. Sebastián Piñera, Michelle Bachelet y Ricardo Lagos lo hicieron de manera presencial ante la comisión de Sistema político, reforma constitucional y forma de Estado; mientras, Eduardo Frei Ruiz-Tagle envió un escrito a dicha instancia. El texto redactado por los expertos fue valorado por los cuatro exmandatarios —aunque tuvieron también recomendaciones de mejoras—, especialmente por la capacidad de llegar a acuerdos transversales entre los distintos sectores políticos. Y eso mismo pidieron para la nueva etapa, cuando los consejeros serán quienes terminen de dar forma a la propuesta constitucional. Con matices, los expresidentes coincidieron en la necesidad de fortalecer el sistema político y avanzar en derechos sociales. Eso sí, igualmente tuvieron críticas respecto de algunas enmiendas.

Eduardo Frei Ruiz-Tagle aboga por un texto de consensos y que permanezca en el tiempo

De los cuatro exmandatarios, solo Eduardo Frei Ruiz-Tagle no visitó la Convención ni ha pisado, hasta ahora, el Consejo Constitucional. En ambas instancias fue invitado por la comisión de Sistema político respectiva, sin embargo, el expresidente se ha excusado y enviado sus reflexiones por escrito. En el proceso anterior, cuestionó que la Convención terminara con el Senado, aunque se mostró de acuerdo en avanzar hacia un Estado plurinacional. Con todo, junto con Sebastián Piñera, fue de los expresidentes que apoyó la opción Rechazo el año pasado. La semana pasada hizo llegar al Consejo su análisis —al que accedió “El Mercurio”— enfocado en el anteproyecto. En sus primeros párrafos, indicó que hoy se “exige de nuestra parte lograr que esta Constitución sea una de consenso, no una de mayorías circunstanciales”, ya que “no nos puede pasar que apenas entre en vigencia la nueva Constitución, un sector postule que debe modificarse”. Sobre los contenidos, postuló que sería ideal un texto breve, valoró que el anteproyecto mantenga el presidencialismo y que la elección de parlamentarios sea durante la segunda vuelta presidencial. Consideró que esto podría eventualmente significar un gobierno con mayoría en un Congreso, pero teorizó que puede que la ciudadanía en segunda vuelta termine votando con la que sería la oposición para que haya contrapesos. También resaltó la agenda legislativa prioritaria, pero tuvo reparos a que en materia de iniciativa exclusiva desaparezca “todo lo que tiene que ver con seguridad social”. Agregó que es necesario que el Consejo profundice que el gasto público se ejecute a través de los gobiernos regionales y locales, para una verdadera descentralización. Menos optimista fue respecto de las propuestas de democracia directa como las iniciativas populares de ley o de derogación total o parcial de ley. Para el exmandatario, hay que darles una segunda mirada.

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Ricardo Lagos endurece el tono, destaca el anteproyecto y le preocupa actual curso del Consejo

Al interior del ex-Congreso sorprendió el tono duro de la intervención del expresidente Ricardo Lagos en la comisión de Sistema político el pasado 3 de agosto. Esto, sin embargo, lo advirtió el mismo exmandatario apenas inició su exposición mientras resaltaba el anteproyecto de la Comisión Experta: “Es digno de destacar este esfuerzo (el anteproyecto) porque estamos viviendo tiempos políticos muy duros. Voy a ser muy franco, porque no creo que valga la pena una mera participación de buenas palabras”, afirmó. En la ocasión, Lagos destacó del anteproyecto el “equilibrio” entre libertades individuales y el catálogo de derechos sociales, normas para fortalecer a los partidos políticos, avances en regionalización y el capítulo de protección al medio ambiente. Sin embargo, realizó varias críticas especialmente a las enmiendas del Partido Republicano. Así, cuestionó que se plantee rebajar el número de parlamentarios, reponer el control sustantivo del Tribunal Constitucional, eliminar la mención a los derechos colectivos de los pueblos indígenas, que las personas que estén privadas de libertad y tengan más de 75 años puedan cumplir su pena con arresto domiciliario, entre otras ideas. “Estoy preocupado por el curso que está tomando el proceso constitucional actual”, ya que en algunos consejeros, dijo, habría “un afán por seducir a la ciudadanía, especialmente con las encuestas que muestran la intención de rechazar en diciembre”. Este fin de semana, entrevistado por Canal 13, expresó además que no está conforme con la Carta vigente —que lleva su firma después de las reformas constitucionales de 2005— y que en caso de ganar la opción “En contra”, se mantendría rigiendo. El año pasado Ricardo Lagos no anunció si votaría Apruebo o Rechazo. Al respecto, dijo que “las dos alternativas en juego están lejos de convocar a la gran mayoría ciudadana”.

Michelle Bachelet resalta el desafío de una Carta “habilitante” y que reencante a los chilenos

“No creo que haya una tercera oportunidad (constitucional)”, afirmó la mañana de este miércoles en radio ADN la expresidenta Michelle Bachelet ante un eventual rechazo a la propuesta que elabore el Consejo. Quizá por ello, el 7 de agosto, en medio de su intervención en la comisión de Sistema político expresó: “Voy a jugar mi rol, no se preocupen… lo que no puedo hacer es darle firmado (el apoyo al texto final) hasta que no vea el proyecto”. En su segunda administración, la exmandataria impulsó un proceso constituyente que no llegó a puerto y el año pasado apoyó el texto de la Convención, participando en la campaña del Apruebo. “No es perfecta, mas se acerca a lo que soñé”, llegó a expresar citando al cantautor cubano Pablo Milanés. Ahora, destacó el anteproyecto y adelantó que si el resultado final fuera parecido a este “votaría a favor”. También declaró que “una buena Constitución es una que ayuda al país, es una Constitución habilitante”. En concreto, del anteproyecto resaltó el umbral del 5% para que partidos tengan representación en el Congreso y las iniciativas populares de ley, entre otros puntos. Respecto de las enmiendas, advirtió que le preocupan algunas que, según su opinión, podrían significar retrocesos a los derechos de las mujeres aludiendo a los derechos sexuales y reproductivos y la paridad. Opinó que “no se debe constitucionalizar ni las isapres ni las AFP” y que los tratados internacionales deberían tener rango constitucional. Con todo, gran parte de su intervención se refirió al actual desinterés ciudadano que reflejan distintas encuestas de opinión. “El gran dilema es lograr algo en que todos podamos convivir. ¿Cómo reencantar a los chilenos (con el proceso)? Es difícil, la gente tiene preocupaciones mucho más concretas, el salario, el empleo, la seguridad social, económica y más tradicional”. Ante ello, incentivó a los consejeros a salir a socializar en terreno los debates del Consejo.

Sebastián Piñera: Siguiendo el debate y con gestos hacia la izquierda y la derecha

“¿Esto se aprueba o se rechaza?”, preguntó el expresidente Sebastián Piñera a consejeras y comisionadas de Chile Vamos durante una cena el pasado 10 de agosto. La cita se había agendado el 24 de julio, el mismo día que el exmandatario expuso ante la comisión de Sistema político. Piñera no había asistido a la Convención Constitucional, donde su figura era resistida por los sectores mayoritarios de izquierda. Esta vez sí estuvo en el Consejo y en su intervención valoró el anteproyecto de los expertos, en especial que este ratifique el presidencialismo, fortalezca el mecanismo de las urgencias presidenciales, la agenda legislativa prioritaria y el umbral del 5%. Sin embargo, para el expresidente el anteproyecto no es perfecto y mostró reparos a ideas como trasladar la elección parlamentaria a la segunda vuelta presidencial, lo que “degrada la elección parlamentaria. Pasa a ser una especie de apéndice”, dijo. También criticó la fórmula de reemplazo de la Constitución, que sería “como un matrimonio con una cláusula de divorcio”, y cuestionó que no estuviera consagrada la libertad de elección. El expresidente valoró ideas de Chile Vamos y de los republicanos, como la reducción del número de parlamentarios, así como otras impulsadas también por la izquierda al considerar que los tratados internacionales deben tener rango constitucional y que es relevante plasmar un Estado social y democrático de derecho, eso sí, “compatible con el rol de la sociedad civil”. Y aseveró: “No podemos fracasar en esta segunda y última oportunidad”. En junio, en el ciclo “Seminarios presidenciales Chile 2050” de la U. Católica, el exmandatario dijo: “Una buena Constitución tiene que ser un gran marco de unidad, de estabilidad, de proyección hacia adelante, para ello tiene que tener legitimidad, y por eso es importante que las constituciones se aprueben por amplias y sólidas mayorías”.

Este artículo es parte del suplemento Crónica Constitucional publicado por e diario El Mercurio el viernes 18 de agosto de 2023.