Las democracias en las Américas van en retroceso
Esto se desprende de un estudio realizado por la organización Instituto Internacional para la Democracia y Asistencia Electoral, IDEA. Chile, Uruguay y Costa Rica quedaron bien rankeados, pero la mayoría de los países de la región están en un rango medio de desempeño democrático, o fueron para atrás.
01/21/2024. El estudio de IDEA arroja que Europa, aunque con riesgos y algunos países con grupos de poder que tienden a la autocracia, sigue mostrando el desempeño democrático más alto a nivel mundial. Esto se debe a que reúne muchos países, especialmente en el norte y el oeste de su geografía, que cuentan con una larga historia de fuertes instituciones públicas.
“Es prometedor que la brecha establecida desde hace mucho tiempo entre estas subregiones y Europa central, los Estados bálticos y partes de Europa oriental haya comenzado a reducirse”, dice el informe de IDEA, que también destaca el hecho de que la Unión Europea (UE) haya movilizado apoyo a Ucrania, demostrando su capacidad para promover la resiliencia democrática en los Estados miembros y no miembros.
Sin embargo, los desafíos actuales en la democracia de larga data, como Austria y el Reino Unido, así como elgrave deterioroen democracias más jóvenes, como Polonia, sirven como recordatorio de la vigilancia necesaria para proteger las instituciones, advierte el informe.
Y agrega que la trayectoria del grupo no democrático, formado por Azerbaiyán, Bielorrusia, Rusia y Turquía, sirve como un ejemplo de cómo los países pueden ejercer una influencia desestabilizadora sobre la estabilidad general de una región predominantemente democrática.
Las Américas han sufrido mayor contracción democrática que expansión en los últimos cinco años, según un estudio del Instituto Internacional para la Democracia y Asistencia Electoral (IDEA), presentado en un seminario virtual del Centro de Estudios del Desarrollo (CED) de Chile, el pasado jueves.
El estudio, lejos de ser alentador, plantea que se identificaron más países en la región con un desempeño bajo en las categorías de democracia (representación, Derechos, participación y Estado de Derecho, con sus atributos) que hace cinco años, aunque la mayoría continúa en el rango medio.
Más precisamente, 15 países de un total de 27 tienen un desempeño medio, y el retroceso se notó sobre todo en seis de ellos. Como suele suceder en los índices de democracia de los últimos años, Chile, Uruguay y Costa Rica son los mejores rankeados en el mundo, en los puestos 4, 9 y 13, respectivamente.
Aqui el enlace para el estudio completo:
The state of democracy in the Americas – The Global State of Democracy 2023 (idea.int)
En contraposición, Haití, Nicaragua y Venezuela han mostrado las caídas más significativas de la región en 2023, y también hubo retrocesos “recientes y rápidos”, dice el informe, en El Salvador y Guatemala. Ecuador también bajó en la escala y, según proyecta IDEA, es muy probable que continúe afectado en los próximos años.
Uno de los fenómenos comunes en varios países de la región es el recurrir a la militarización y a los estados de excepción con mayor frecuencia en los últimos tiempos, como forma de abordar al narcotráfico y otros delitos, lo que dio más poder a las fuerzas armadas. Ésto, según IDEA, en muchos casos termina socavando los Estados de Derecho, si no hay instituciones de contrapeso que puedan equilibrar.
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Entre los países que recurrieron a una mayor militarización, con efectos colaterales en los Derechos y Estado de Derecho, están Ecuador, El Salvador, Honduras, México y Perú.
La difusión de fake news (noticias falsas) es otro fenómeno que se ha extendido afectando a las democracias, dado que suelen despertar desconfianza en las instituciones y en los procesos electorales. Al decir de Ricardo Mena, Oficial del Programa Chile y Cono Sur de IDEA, “la gente desconfía de los resultados electorales aun antes de las elecciones”.
Efectivamente, los escenarios bajo sospecha se repiten antes de votar, muchas veces porque la gente se maneja dentro de “burbujas informativas”, de acuerdo al informe.
Erosión constante.
El estudio muestra que el mayor declive se da en los atributos “elecciones creíbles” y “parlamento eficaz”, lo que se vincula a la erosión de las instituciones. Mena afirmó que ya no ocurren golpes de Estado como en décadas pasadas, sino personas o grupos que, cuando llegan al poder, activan mecanismos de desgaste de las instituciones democráticas o atacan las libertades para perpetuarse, aun habiendo sido electos democráticamente. “Los tribunales electorales son los primeros en ser erosionados”, expresó.
Según surge del estudio, resulta más preocupante la pérdida del Estado de Derecho y de garantías de Derecho (por aumento de la corrupción y nulo respeto a la separación de poderes), que la participación ciudadana que, con altibajos y según los países, se ha mantenido bastante.
En la línea de la pérdida de las garantías de los Derechos, Mena mencionó los casos de Guatemala, donde al presidente electo, Bernardo Arévalo, tuvo dificultades para asumir el pasado 15 de enero, por “interferencia electoral injustificada”, según expertos; y el caso de Ecuador, desbordado por bandas criminales que tomaron control de un canal de televisión, de otras instituciones y de las calles.
“El ejercicio del derecho se vio limitado por dos años durante la pandemia del covid-19 y su reactivación fue lenta o se ha perdido en muchos países”, dijo Mena, y agregó que la autocracia también ha crecido en Europa y a nivel global.
Una de las conclusiones es que el hastío de la ciudadanía por los problemas económicos y, sobre todo, ante una delincuencia creciente, ha resultado en caldo de cultivo para determinados liderazgos que prometen mayor seguridad, pero limitando las libertades individuales. “Aumentó la cantidad de gente dispuesta a renunciar a sus libertades a cambio de más seguridad personal”, advirtió Mena. Cabe señalar que a la misma conclusión llegaron estudios de Latinobarómetro, por lo que analistas observan la importancia de lograr un balance en la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado sin socavar los espacios o libertad ciudadana.
Julieta Suárez-Cao, doctora en Ciencias Políticas y académica de la Pontificia Universidad Católica de Chile, quien participó en el seminario de CED Chile, invitó a pensar en los controles populares de las decisiones públicas, dado que “las democracias no desaparecen por muerte súbita, sino por erosiones lentas y constantes”, y consideró que países como Estados Unidos o europeos no están ajenos a esta realidad.
“Hay retrocesos en la democracia donde antes no había, desconfianza en las instituciones en la mayoría de los países, caída del apoyo a las democracias por hartazgo ciudadano. Por primera vez, los jóvenes están también descreídos y atentos más a lo individual que a lo colectivo, lo que tendrá impacto en las democracias en los próximos años”, resumió Suárez-Cao. “Todas son pendientes resbaladizas que arrasan de a poco con las democracias”, acotó.
El estudio destaca asimismo el asalto a las instituciones, como a los poderes de Brasil (2023) y al Capitolio en EE.UU. (2021), como una alerta roja.
En cuanto a la represión de periodistas y medios de comunicación, se nota empeoramiento, de acuerdo al estudio. Diez países de la región experimentaron caídas notables en dicho atributo el año pasado, mientras que en 2017 el número era de siete países.
Especial mención tuvo México, donde murieron más periodistas cubriendo casos de corrupción que en la guerra en Ucrania en 2022, según datos de Reporteros Sin Fronteras (RSF), recogidos por IDEA.
Con información de elpais.com.uy