El juez supremo Juan Carlos Checkley dictó 18 meses de prisión preventiva para el vacado expresidente Pedro Castillo por los supuestos delitos de rebelión y otros, los cuales fueron cometidos en el golpe de Estado perpetrado el pasado 7 de diciembre.

Además, el juez ordenó comparecencia con restricciones para el expremier Aníbal Torres. 

En la audiencia, el magistrado evidenció el peligro de fuga por parte del aspirante a tirano, quien, luego de quebrar el orden constitucional, se dirigió a la Embajada de México, país que anunció que le otorgaría asilo político, pero fue detenido por us propia escolta policial al encontrarse en flagrancia.  

Castillo, bajo detención preliminar en el penal de la Diroes (Ate), es investigado por la Fiscalía como presunto coautor de rebelión, y, alternativamente, conspiración, y también como presunto autor de abuso de autoridad y contra la tranquilidad pública.

El Ministerio Público ha estimado que la pena del golpista exmandatario “superaría largamente los cuatro años de pena privativa de libertad (y) esta no sería inferior a los diez años”.