En un esfuerzo por elevar el techo de la deuda de Estados Unidos y lograr recortes adicionales en el gasto federal, la legislación negociada por el presidente Joe Biden y el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, superó un importante obstáculo el martes por la noche. La Comisión de Normas de la Cámara de Representantes votó a favor de aprobar las normas que permiten el debate en el pleno, con una estrecha votación de 7 a 6. Sin embargo, dos republicanos de la comisión, los representantes Chip Roy y Ralph Norman, se opusieron al proyecto de ley.

Esta votación destaca la necesidad de que los demócratas colaboren en la aprobación de la medida en la Cámara de Representantes, que está controlada por los republicanos con una estrecha mayoría de 222-213. Si la medida es aprobada en la Cámara, se enviará al Senado. El Congreso tiene hasta el 5 de junio para aprobarla, ya que esa es la fecha en la que el Departamento del Tesoro podría quedarse sin fondos para pagar sus deudas por primera vez en la historia de Estados Unidos.

El potencial caos económico tanto en la economía estadounidense como en la mundial si el Departamento del Tesoro no puede cumplir con todos sus pagos o se ve obligado a priorizarlos ha llevado a la urgencia de aprobar la legislación. Tanto Biden como McCarthy confían en que obtendrán los votos suficientes para convertir el proyecto de ley en ley antes de la fecha límite del 5 de junio.

Según la Oficina Presupuestaria del Congreso, la ley reduciría el gasto en 1,5 billones de dólares en 10 años a partir de 2024. Además, se estima que reduciría los intereses de la deuda pública en 188.000 millones de dólares. McCarthy ha calificado el proyecto de ley como «el acuerdo más conservador que hemos alcanzado nunca», aunque algunos republicanos más conservadores no están convencidos debido a que buscaban recortes de gasto más profundos.

La votación en la Cámara de Representantes no estuvo exenta de división. Los cuatro demócratas de la Comisión de Reglamento votaron en contra del proyecto, como suele suceder con las leyes impulsadas por los republicanos. Sin embargo, el líder demócrata Hakeem Jeffries aseguró que su partido proporcionaría el apoyo necesario para la aprobación.

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El proyecto de ley también enfrentará una batalla en el Senado, donde algunos miembros podrían intentar retrasar su aprobación. El proyecto de ley suspendería el límite de la deuda hasta el 1 de enero de 2025 y establecería limitaciones en el gasto público, entre otras disposiciones. Aunque hay aspectos que generan malestar entre los republicanos, como la reducción de financiamiento de la Agencia Tributaria, el acuerdo deja en gran medida intactas las leyes de infraestructura y energía verde de Biden.

El estancamiento del techo de la deuda ha llevado a advertencias de agencias de calificación sobre la posible rebaja de la calificación.

Redacción DHH con información pública de Reuters

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