Hoy vamos a presentarles a uno de los bateadores más puros y naturales que participó en la Liga Nacional, en las últimas dos décadas del siglo pasado: Hablaremos de Tony Gwynn.

07/21/2024.  Redacción del historiador y analista deportivo Eliexser Pirela Leal

Este jardinero zurdo terminó su carrera de 20 campañas con 10.232 apariciones en el plato y 9.288 turnos legales; en los que disparó 3.141 imparables, para un extraordinario promedio de .338 de average.
Es que en cinco oportunidades conectó 200 o más hits por temporada y siete veces fue el líder de imparables en el viejo circuito.

«Duro de ponchar»

Pero llama la atención que únicamente se ponchó 434 veces, incluyendo un tope de 40 ponches, en la zafra de 1988, temporada en la que terminó con 578 apariciones en el plato.
Es que en 20 campañas en las Grandes Ligas, todas con los Padres de San Diego, Gwynn culminó con algunos enfrentamientos individuales que nos llaman la atención, tales como los siguientes: El primero que mencionaremos es con el dominicano Pedro Martínez, miembro del Salón de la Fama con quien se enfrentó 36 veces y nunca fue abanicado; igualmente ante Greg Maddux, quien se encuentra entre los 10 mejores ponchadores en la historia, en 107 turnos legales frente a Maddux, este derecho nunca lo pudo abanicar. Pero si hacemos una comparación más amplia, ante cuatro grandes ponchadores, incluyendo a los dos mencionados (Pedro Martínez y Greg Maddux) junto a Tom Glavine y John Smoltz, a ese cuarteto se enfrentó 323 veces y sólo salió guillotinado en tres oportunidades… simplemente impresionante.

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Ocho títulos de bateo

Gwynn sumo a su vitrina ocho títulos de bateo, siete bates de plata, como jardinero se llevó 5 Guantes de Oro y asistió, merecidamente, a 15 Juegos de Estrellas.
Logró anotar un total de 1.383 carreras y entre sus 3.141 indiscutibles disparó 543 dobletes, 85 triples y 135 cuadrangulares.
En 1994 terminó compro medio de .394, el más alto desde los .406 de Ted Williams en 1941; dio 165 hits en 419 turnos y por mucho tiempo coqueteó con los .400 puntos de promedio.

 Redacción del historiador y analista deportivo Eliexser Pirela Leal