Los miembros de las Fuerzas de Defensa fueron confinados al campamento ayer, ya que un estado de mayor conciencia permaneció vigente hasta nuevo aviso.
11/01/2025. Las fuentes confirmaron que se emitió el «estado de alerta» para que los miembros del Regimiento, la Guardia Costera y la Guardia Aérea se presentaran a trabajar ayer, en medio de informes de medios internacionales de que un ataque estadounidense contra Venezuela era «inminente».
Fuentes militares dijeron que el estado de alerta, descrito en mensajes internos como una «postura de Estado Uno», es una medida de precaución introducida para garantizar que todos los elementos de la Fuerza de Defensa estén preparados para responder de manera rápida y efectiva a cualquier amenaza a la seguridad nacional o regional.
Estos informes de un ataque inminente han sido desestimados desde entonces por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y varios funcionarios de la Casa Blanca.
Sin embargo, fuentes de la Fuerza de Defensa confirmaron que, si bien no había una amenaza directa e inminente para Trinidad y Tobago, el estado de alerta elevado se declaró como precaución en caso de cualquier cambio en el «panorama de seguridad regional».
Una fuente confirmó que una sesión informativa conjunta de una hora a la que asistieron varios oficiales militares de alto rango en el Cuartel General de las Fuerzas de Defensa en Chaguaramas ayer por la tarde reveló que la llamada era simplemente para garantizar que «todas las manos estuvieran en cubierta».
«Se están asegurando de que haya controles adecuados de los equipos, inspecciones de armas y municiones y otros procedimientos. Es para garantizar que nuestras estaciones estén atendidas y también para que la seguridad fronteriza responda a cualquier cosa. Es realmente para que adoptemos una postura de preparación y veo que la policía está haciendo lo mismo en este momento».
Subrayó que tales procedimientos no eran un indicador de ninguna amenaza inminente e instó al público a no entrar en pánico.
A pesar de esto, varias escuelas cerraron temprano por precaución, mientras que las tiendas de comestibles en todo el país informaron multitudes más grandes de lo habitual, y algunas personas compraron suministros por temor a cualquier desarrollo urgente.
Cuando Guardian Media visitó ayer el puesto de control de seguridad en las afueras del cuartel general de la Guardia Costera de Staubles Bay en Chaguaramas, se vieron varios vehículos civiles entrando en el complejo.
También se vio al menos a dos soldados caminando hacia el complejo después de hablar brevemente con los centinelas de guardia en la caseta de guardia.
Una fuente de la Fuerza de Defensa dijo que a medida que las tropas continúen informando en las bases militares de todo el país, los procedimientos conocidos como reuniones de rendición de cuentas se realizarán de manera regular para garantizar que todos los miembros de batallones o destacamentos particulares estén en las instalaciones.
Se esperaba que se llevara a cabo una segunda sesión informativa sobre la postura de alerta intensificada más tarde ayer.
Un funcionario de menor rango de la Fuerza de Defensa dijo que estaba al tanto de colegas que esperaban un vuelo desde Tobago antes de poder presentarse en sus bases militares designadas, y señaló que otros ya habían recibido instrucciones de comenzar las operaciones de protección fronteriza.
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Guardian Media envió preguntas a un portavoz de la Fuerza de Defensa y al ministro de Defensa, Wayne Sturge, para confirmar el estado de alerta, pero no recibió respuesta hasta el cierre de esta edición.
Contactado ayer para comentar sobre la situación, el coronel retirado Lyle Alexander dijo que le preocupaba que no hubiera una confirmación formal de las entidades estatales sobre el asunto.
«Situaciones como esta pueden hacer que el público entre en pánico y dibuje sus propias percepciones de lo que creen que está sucediendo, lo que puede causar cierta inquietud en el entorno», dijo Alexander.
«Es sorprendente que no haya comentarios del ministerio, así que solo tenemos que esperar para ver. Hay algunos que pueden tratar estas cosas de una manera particular, pero hay otros que ciertamente se emocionarán y se preocuparán y eso es ciertamente lo que debe abordarse».
Alexander, quien sirvió en el regimiento durante 34 años, también señaló que, si bien no era inusual que los soldados individuales fueran llamados a presentarse al servicio, llamar a una parte tan considerable de soldados, especialmente dadas las operaciones militares en curso en las cercanías, generaría preguntas y preocupaciones.
En un comunicado ayer, el ex ministro de Seguridad Nacional, Gary Griffith, dijo que había una necesidad urgente de que el Gobierno emitiera mensajes directos y claros en un intento por reducir la inquietud y el pánico entre el público.
Destacó que la importancia de que las autoridades emitan información ya está establecida. Señalando una situación con rumores que surgieron poco después del intento de golpe de Estado de 1990, dijo que el Gobierno tenía la responsabilidad de informar con precisión al público.
«Ya sea que este confinamiento en el campo sea cierto o no, el hecho es que ha circulado por todo el país», dijo Griffith.
«El Centro Nacional de Operaciones debe ser consciente de esto y, por lo tanto, poder confirmar cuál de las siguientes situaciones está ocurriendo; A) Confirmar que esto no es cierto y que no se ha producido ningún confinamiento en el campamento B) Que solo se ha llamado a personal militar específico al campamento o C) Que todo el personal militar ha sido dirigido al campamento.
«Cualquiera que sea, esta información debería haberse presentado de inmediato a la Honorable Primera Ministra como presidenta del Consejo de Seguridad Nacional para que pueda asesorar y ordenar al NOC que luego informe y guíe al público en consecuencia».
Con información de guardian.co.tt
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