«Esta guerra va a terminar»: Donald Trump con cierto optimismo

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«Esta guerra va a terminar»: Donald Trump expresó este lunes cierto optimismo sobre la posibilidad de lograr la paz en Ucrania, al recibir amablemente a Volodymyr Zelensky

08/18/2025. Rápidamente quedó claro que esta reunión crucial sería muy diferente de la que vio al presidente de Estados Unidos humillar públicamente a su homólogo ucraniano a fines de febrero.

Donald Trump, al dar la bienvenida a Volodymyr Zelensky alrededor de la 1:15 p.m. hora local, lo felicitó por su chaqueta y camisa oscuras, reemplazando su atuendo habitual de inspiración militar.

El jefe de Estado ucraniano, criticado por última vez por los partidarios del multimillonario republicano por su elección de ropa y porque no había expresado suficiente gratitud, esta vez agradeció a su anfitrión al comienzo de su reunión.

«Gracias por la invitación y muchas gracias por sus esfuerzos, sus esfuerzos personales para detener la matanza y detener esta guerra», dijo el presidente ucraniano en la Oficina Oval.

«Muy buena protección»

Donald Trump, sin entrar en detalles, aseguró que Estados Unidos «estará involucrado» en la seguridad futura de Ucrania, un tema crucial para Kiev y los europeos.

«Les daremos muy buena protección», prometió, después de haber especificado recientemente que cualquier garantía de seguridad tendría que inventarse fuera del marco de la OTAN, para ser aceptada por Moscú.

Por otro lado, volvió a juzgar que un alto el fuego no era necesario para iniciar un proceso de paz, al contrario de lo que exigen los ucranianos y sus aliados europeos.

El presidente estadounidense también reiteró que quería organizar una reunión a tres bandas con Vladimir Putin, «si todo va bien», y anunció que llamaría al líder ruso, con quien se reunió el viernes en Alaska, más tarde el lunes.

Puedes leer: Trump no descarta las garantías de seguridad para Ucrania –

Europeos que se unieron

Tras su encuentro bilateral, Volodymyr Zelensky y Donald Trump se unirán a los líderes europeos, que han venido a Washington para unirse en torno al jefe de Estado ucraniano.

El jefe de la OTAN, Mark Rutte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el primer ministro británico, Keir Starmer, llegaron a la Casa Blanca, recibidos por la jefa de protocolo, Monica Crawley, mientras sonaba una alerta aérea en Kiev.

A esto le siguieron en un ballet de protocolo sin precedentes el canciller alemán Friedrich Merz, la primera ministra italiana Giorgia Meloni, el presidente finlandés Alexander Stubb y el presidente francés Emmanuel Macron.

El presidente ucraniano había reiterado el lunes, antes de llegar a la Casa Blanca, que Rusia no debería ser «recompensada» por invadir su país en febrero de 2022.

El presidente estadounidense, que nunca ha culpado a Rusia del conflicto, escribió en su red Truth Social que Volodymyr Zelensky «podría poner fin a la guerra con Rusia casi de inmediato si quisiera».

«Sé exactamente lo que estoy haciendo»

Dolido por las críticas de sus oponentes a la reunión del viernes con Vladimir Putin, durante la cual no obtuvo ni un alto el fuego ni concesiones públicas, Donald Trump respondió en un tono enojado.

«Sé exactamente lo que estoy haciendo», escribió el lunes en Truth Social.

El multimillonario republicano, que es muy vago sobre lo que espera de Moscú, ha dicho públicamente lo que quiere de Kiev: renunciar a Crimea, que ha estado ocupada por Rusia desde 2014, así como a la membresía en la OTAN.

Un funcionario familiarizado con las conversaciones telefónicas del sábado entre el presidente estadounidense y los líderes europeos dijo a la AFP que Donald Trump también apoyaba una propuesta rusa de que Kiev cedería las regiones de Donetsk y Luhansk (este), y el frente se congelaría en las regiones de Jersón y Zaporiyia (sur).

El lunes, los combates continuaron en Ucrania, con ataques con drones y misiles.

Un ataque ruso con aviones no tripulados mató a siete personas e hirió a otras en Kharkiv, en el este de Ucrania, según las autoridades locales.

En la región sureña de Zaporizhzhia, tres personas murieron y 30 resultaron heridas en el bombardeo, según el gobernador regional Ivan Fedorov.

Otro ataque ruso mató a cuatro personas e hirió a otras siete en la región de Donetsk, en el este de Ucrania, donde se está llevando a cabo la mayor parte de los combates, dijo la oficina del fiscal regional.

Redacción DHH sobre lectura de agencias

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