La entrega de los dos sobrinos condenados por narcotráfico por la justicia norteamericana, demuestra una vez más que el poder ejecutivo en los Estados Unidos responde a particularidades políticas, y no al discurso globalista de integración y respeto a la democracia.

La cuestión comienza por un problema de enfoque. Los venezolanos en su mayoría piensan: ¿Como es posible que Biden haya soltado a dos narcotraficantes, además sobrinos de la pareja presidencial? Que bolas¡¡. Mientras que el discurso de los demócratas es: logramos la liberación de 7 compatriotas rehenes del régimen de Maduro, y seguro muchos aplaudirán la acción.

Bajo esa perspectiva hay que ver el contexto político en el cual se desarrolla la política de Biden. De hecho, el discurso de la democracia, de las sanciones, de la lucha contra el narcotráfico es solo eso, discurso panfletario para enmascarar lo que es común en la política norteamericana ,el pragmatismo. Atrás quedaron las políticas de Kennedy contra el comunismo en América Latina, y la visión de la democracia para el continente.

Sin duda debió ser una decisión dura para Biden, pero privó el nacionalismo norteamericano ante que la humillación al colectivo venezolano que siente una bofetada para quienes han sufrido las consecuencias de la mancuerna droga y corrupción, y que en ese país son muchos.

En las redes sociales se comenta que el intercambio fue como en los tiempos guerra, como si eso fuese en el pasado. Craso error, porque en nuestro continente estamos en tiempo de guerra. No es un pasado, la guerra es actual, presente, no con balas y cañones para ver quien domina un territorio, sino la guerra de quien domina a las masas con el discurso de derecha o de izquierda. La lucha esta en el modelo de democracia que debe permanecer en latinoamérica. Y alli, en ese terreno, Biden tiene pocos argumentos que mostrar que garanticen esa lucha durante su mandato.

Aqui cada país tiene su enfoque y sus necesidades prácticas. Es como cuando llegó Colón a este continente, creemos que todos gritaron : Tierra¡¡¡ y no fue asi. Asi gritaron los que venían en las carabelas, porque los nativos si gritaron algo, debió ser: Barco¡¡¡¡

Mientras Biden y la política demócrata este instalada en la Casablanca, seguirán estos acontecimientos con Venezuela, Cuba, nicaragua y paises donde gobierne la izquierda. Asi que no es de extrañar que en la próxima negociación salga Saab. Si en los Estados Unidos, el tema del narcotráfico es tan urticante para su justicia, y Biden sin despeinarse toma esa decisión, ¿dudan en que pueda hacer lo mismo con Saab por algun beneficio crematistico?

A los comunistas no se les puede analizar por lo que dicen sino por lo que hacen. siempre están viendo a un plazo más largo que el juego concreto. Biden va a terminar como decía Ortega y Gasset, cada día le va a interesar menos ser juez de las cosas para ir prefiriendo ser su amante.

Redacción DHH,