El separatista Puigdemont regresó a España y la policía desata una cacería para detenerlo
Regresó al país tras siete años de exilio y con una orden de detención en su contra por malversación. Este miércoles había prometido que regresaría y llamó a una manifestación en Barcelona. Dio un discurso y luego desapareció.
08/08/2024. Casi siete años después de haber huido de España y como en un truco propio de un ilusionista, el ex presidente catalán Carles Puigdemont apareció en la mañana de este jueves en Barcelona para boicotear la elección del nuevo presidente de Cataluña y, luego de un discurso de menos de diez minutos, desapareció entre la multitud.
Hasta pasado este mediodía, el paradero de Carles Puigdemont seguía siendo un misterio.
A 170 kilómetros del Parlamento, sobre la autopista AP 7, en el paso fronterizo de La Junquera que separa España de Francia, los Mossos d’ Esquadra -la policía regional catalana- montaron un operativo que llamaron “jaula” para dar con el ex presidente, sobre quien pesa una orden de detención. Revisan hasta los baúles de los autos y a los motociclistas les piden que se saquen el casco.
Puigdemont no pisaba suelo español desde octubre de 2017, cuando organizó un referéndum ilegal, declaró unilateralmente la independencia de Cataluña y se fugó a Bélgica para evitar ir a parar al calabozo. Aún pesa sobre él una orden de detención.
En las últimas elecciones regionales fue el candidato de su partido, Junts per Catalunya, y salió segundo. Durante la campaña había prometido regresar a casa y estar presente en la sesión de investidura que, según sus cálculos, lo devolvería a la presidencia del Palacio de la Generalitat.
Puedes leer: 30 Exmandatarios enfrentan crisis de Venezuela – Dehablahispana
Pero el músculo independentista se mostró fatigado en las urnas y, por primera vez desde los años ’80, las tres fuerzas principales separatistas -Esquerra, Junts y la CUP- no lograron reunir la mitad más una de las 135 bancas que integran el Parlamento para asegurarse un gobierno separatista.
Un minuto de diez minutos
El ex presidente, sin embargo, no se dio por vencido. Presionó para poder postularse a una investidura para la que no le daban los números y este jueves, aunque no participó en el debate adentro del Parlamento, sí tuvo sus minutos de gloria en un discurso que dio a metros del salón donde se reunían los diputados.
“Hemos venidos para recordarles que aun estamos aquí”, dijo Puigdemont con el puño derecho en alto.
Su partido, Junts per Catalunya, organizó una movilización para recibirlo este jueves por la mañana en el Passeig Lluís Companys, a pocos metros del Parlamento donde a las diez de la mañana comenzó el debate de investidura del que saldría elegido como nuevo presidente catalán el socialista Salvador Illa, el ex ministro de Salud de Pedro Sánchez que ganó las elecciones regionales de mayo.
“Una durísima represión que nos ha llevado a la prisión y al exilio”, agregó.
“Ni es ni será más un delito un delito realizar un referéndum ni obedecer al mandato del Parlamento”, sentenció antes de desaparecer por un costado del escenario donde lo esperaba su abogado, el chileno Gonzalo Boye.
Con información de clarin.com